La música es un lenguaje universal que trasciende fronteras y conecta corazones. En la Escuela Pedagógica Experimental (EPE), esta en verdad resuena con fuerza, alimentando el espíritu creativo y fomentando el desarrollo integral de sus estudiantes. Recientemente, los alumnos tuvieron el privilegio de sumergirse en el mundo del ritmo y la producción musical a través de una serie de talleres impartidos por el talentoso exalumno de la EPE y reconocido percusionista, Miguel Guerra Guerrero.
Miguel Guerra, es un nombre que resuena en la escena musical colombiana e internacional. Con una impresionante trayectoria que incluye colaboraciones con destacados grupos como la Orquesta de Salsa La 33 y la aclamada banda Monsieur Periné, Miguel ha dejado una huella indeleble en el mundo de la música. Su talento y dedicación le han valido el reconocimiento de la industria, incluyendo un Latin Grammy como mejor nuevo artista en 2015.
La llegada de Miguel a la EPE no solo representó una oportunidad para aprender de un maestro consumado, sino también un momento de inspiración y conexión con el mundo profesional de la música. Los talleres de percusión y producción musical brindaron a los estudiantes la oportunidad de explorar nuevas formas de expresión, desarrollar habilidades técnicas y sumergirse en la riqueza cultural de la música colombiana.
Durante los talleres, Miguel compartió su experiencia personal y profesional, ofreciendo valiosos consejos y técnicas aprendidas a lo largo de su carrera. Desde ritmos tradicionales como la cumbia y el porro hasta técnicas de producción musical moderna, los estudiantes fueron guiados en un viaje de descubrimiento y aprendizaje.
La importancia de contar con la presencia de Miguel en la EPE va más allá de su talento musical. Su historia de superación y éxito sirve como inspiración para los jóvenes estudiantes, mostrándoles que, con dedicación y pasión, los sueños pueden hacerse realidad. Además, su conexión con la escuela como exalumno crea un vínculo especial, demostrando que los valores y enseñanzas impartidos en la EPE perduran en el tiempo y pueden llevar a grandes logros.
Para los estudiantes de la EPE que ven en la música no solo un gusto, sino una pasión, la oportunidad de aprender de alguien como Miguel Guerra Guerrero es invaluable. Más allá de adquirir habilidades técnicas, los talleres les brindaron una visión más amplia del mundo de la música y les inspiraron a seguir persiguiendo sus sueños con determinación y perseverancia.
A medida que los ecos de los talleres de percusión y producción musical se desvanecen en los pasillos de la EPE, queda el recuerdo de una experiencia enriquecedora y transformadora. Gracias a la generosidad y el talento de Miguel, los estudiantes de la Escuela Pedagógica Experimental continúan su viaje hacia la excelencia musical y el crecimiento personal, con el ritmo en sus corazones y la melodía en sus almas.